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La importancia de tener el acompañamiento de una doula posparto

La importancia de tener el acompañamiento de una doula posparto

       Como te hemos platicado en anteriores ocasiones, el posparto es una etapa llena de retos, sin embargo, contar con el apoyo e información necesaria, le permite a las mamás pasar por este proceso de forma más amena, el acompañamiento de una doula posparto puede hacer una gran diferencia en la calma y recuperación de una mamá.

Para saber más al respecto, queremos compartirte lo más relevante de nuestra charla con Karen Levy Gálvez, a quien puedes encontrar en Instagram (https://www.instagram.com/karen.levy.galvez/). Karen es mamá y doula posparto, desde su experiencia como ambas, nos platicó lo importante que es contar con el acompañamiento de una doula después del parto.

El acompañamiento de una doula posparto

Tener la compañía de una doula posparto es darle a la mamá la oportunidad de tener una orientación cálida y humana para atravesar el inicio de la maternidad. No importa si es mamá primeriza o no, contar con el apoyo de alguien que está ahí para ti puede cambiar el panorama, incluso, la percepción que la mamá tiene de sí misma.

La intención de este texto es encaminarte a un posparto amable y para ello, necesitamos poner temas sobre la mesa que pueden ayudarte a lograrlo. En otra ocasión ya te platicamos qué es una doula y cuál es su papel en la maternidad, ahora, queremos hablar específicamente de lo que hace una doula posparto y se lo preguntamos a Karen.

Primero, hay que decir que una doula y una doula posparto son mujeres acompañando a mujeres y existe una sola diferencia entre una y otra, la cual nos explicó Karen, “la doula posparto se especializa y se enfoca en el posparto y una doula de embarazo y parto, se enfoca en el embarazo, parto y un poquito de posparto”.

Doula posparto: compañía para mamá

Con respecto a cuál es el papel de una doula posparto, Karen respondió, “acompañar”, pero este acompañamiento se da de diferentes formas, por lo que es personalizado según lo que se necesite.

“Hay quienes se enfocan mucho en las mujeres, hay quienes se enfocan mucho en los bebés, en el acompañamiento de todas las cosas nuevas que hay que hacer por los bebés como bañarlos, vestirlos…”, explicó la especialista para ejemplificar el tipo de atención que una doula posparto puede dar.

Así como una doula puede convertirse en un apoyo para todos los integrantes de la familia, “hay formas de acompañar muy apapachadoras, muy de rituales,” también puede ser un acompañamiento más técnico, “información puntual basada en evidencia”. Por otro lado, hay formas de acompañar muy terapéuticas, “como el uso de hierbas y remedios muy naturales y tradicionales para el posparto”.

Además, está el acompañamiento muy educativo sobre los cambios fisiológicos del cuerpo, “hay muchas ramas de acompañamiento pero todo se une en acompañar y dar información basada en evidencia, información revisada para que las mamás y los papás puedan tomar decisiones sobre su posparto”. En su caso, Karen procura acompañar desde antes, “la forma en la que yo acompaño es desde el embarazo, que me parece una parte fundamental, que es dar clases de preparación para el posparto”.

Nuevas preguntas y más información

Para la experta, es importante conocer con anticipación lo que el posparto puede representar en la vida de los involucrados, ya que en muchas ocasiones el embarazo es visto como la meta, cuando apenas es el comienzo de una gran aventura.

“Como tenemos esa meta en la mente, muchas veces, lo que viene después lo damos por sentado, ¡ah pues tienes a tu bebé y listo, lo crías y lo maternas y ya… Cuando en realidad todo empieza el día que nace tu bebé”. 

Karen Levy da clases de preparación al posparto a parejas y mujeres embarazadas.

“Muchas veces me pasa que en las clases que yo doy de preparación, ellos esperan recibir una lista, qué carriola, cuántas mamilas, qué necesito para mi bebé”, sin embargo, el propósito de este curso no es ese, “terminan con una información distinta a la que esperaban”. Entonces, ¿de qué manera Karen prepara a los papás antes del parto?

“Lo que yo hago es darles un abanico de posibilidades y de colores en el posparto, para que puedan sensibilizarse con lo que puede pasar, con lo que sí va a pasar… En términos emocionales, en términos de logística, todo esto puede pasar”. Por otro lado, el que la mamá o los papás se acerquen a este curso les abre el panorama de lo que vendrá y que quizá aún ni se imaginan, “les doy temas que tienen que sentarse a platicar, cosas que no se les habían ocurrido que podían pasar y que deben preparar”.

¿Cuánto tiempo está la doula con mamá?

“Depende de la doula posparto y depende de la familia”, explicó Karen, “el acompañamiento dura tanto como la mamá necesita... hay mamás que te sueltan muy pronto y hay mamás que no te sueltan y que necesitan que estés ahí”.

“Hay muchas formas de acompañar y hay muchas formas en las que una doula se organiza para ofrecer servicios”, en este caso, ambas partes lo platican para llegar a un acuerdo.

“Lo que yo hago, es ofrecer un plan de acompañamiento en donde en las primeras semanas, las visitas o las sesiones en línea, son periódicas y se van espaciando conforme mamá las va necesitando y se abordan diferentes temas”, explicó la experta.

Nace un bebé y nace una mamá

Con respecto a los temas que se abordan pueden ser planeados o pueden surgir si la mamá lo necesita en el momento, “hay cosas que no se planean y sólo estando ahí (en el posparto) se abordan, son cosas que no te imaginas que pueden pasar”.

El tiempo que una doula acompañe en el posparto tiene que ver con cómo se siente la mamá en su maternidad.

“Tiene mucho que ver con ellas, con lo que hacen, con cómo se preparan, con lo que comunican, de lo que se proveen, de su tribu, de su red familiar, de su red de apoyo…”, explicó Levy.

Por otro lado, hay mamás que afrontan su maternidad más independientes, “hay mamás que sólo necesitan un ritual, no necesitan un acompañamiento continuo, hay mamás que sólo necesitan una sesión para ser escuchadas, llorarlo todo, acomodarlo y ya”.

Ceremonia de cierre de cadera 

Aunque la pandemia por Covid-19 modificó la interacción y algunas sesiones son virtuales, la ceremonia de cierre de cadera sigue siendo una de las experiencias más relevantes después del parto, “es para lo que más me buscan ahorita”, añadió Karen Levy.

“Una ceremonia de cierre de cadera incluye un masaje, un cierre con rebozo y un baño de hierbas”, explicó la doula posparto dando un resumen.

 “Es una tradición y como en todo, las tradiciones tienen matices depende el lugar… Pero en todas las culturas es súper interesante ver cómo hay mucho cuidado y atención al posparto excepto ahora en las vidas de las ciudades”, agregó la doula para enfatizar en la importancia de hacer un espacio para procurar la salud física, emocional y espiritual de una mamá.

Parece que hoy en día, “la sociedad está esperando a ver a qué hora regresas a ser un miembro productivo de ella”.

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¿Qué representa esta ceremonia?

Levy explicó que esta práctica combina tres tradiciones, “la ceremonia de cierre de cadera representa honrar el camino de maternidad de una mujer”.

La ceremonia de cierre de cadera es un instante dedicado a la mamá que tiene ante sí la enorme responsabilidad de su maternidad, “en un momento en donde entregamos y ofrendamos todas nuestras vidas, nuestro cuerpo, nuestra leche, nuestra sangre, nuestro tiempo, nuestro sueño, nuestros sueños, todo lo damos a nuestros bebés”.

Es hacer una pausa en medio del compromiso gigantesco que representa la maternidad para que la mamá se conecte con ella misma, “es un momento para decir, voy a tener una ceremonia, este tiempo es para mí, para yo recibir. Voy a parar un poco, alguien se va a encargar de mi bebé y yo voy a recibir un apapacho delicioso de una doula posparto que va a venir a mi casa a encargarse de todo”.

“Es una ceremonia súper apapachadora, de mucha integración emocional, de mucho soltar el dolor, soltar la frustración, los miedos”, añadió. De este modo, es una oportunidad para la mamá, “de sentirse querida, contenida, de mucha escucha y mucha comunicación en donde y te sientes renovada, sientes que ha concluido un capítulo”.

¿Cuándo se realiza?

El momento indicado para realizar el cierre de cadera es, “se hace a partir de que termina la cuarentena, en cuanto termina el sangrado de cuarentena”, dijo.

Karen nos compartió que los baños se pueden hacer desde antes, pero la ceremonia completa con masaje y cierre después de la cuarentena “y hasta el resto de la vida, he cerrado a mujeres de setenta años que nunca se hicieron un cierre en sus pospartos”. La ceremonia de cadera es un ritual dedicado a la mamá que nació cuando dio a luz a su bebé, es una caricia para ella en todos los niveles.

De doula a mamá: prepárate, rodéate, comunícate y participa

Sólo podrás saber lo que el posparto tiene para ti hasta que lo vivas, cada mamá lo experimentará de modo diferente, incluso, puede vivirlo diferente entre un embarazo y otro. Por ello, Karen nos compartió cuatro consejos para que las mamás sobrelleven su recuperación física, mental y emocional, ¡toma nota!

  1. Prepárate.

“Va a ser una aventura muy significativa en tu vida… Infórmate, lee, toma cursos, habla con otras mamás, entérate de la verdad sobre el posparto”.

La experta recomienda que durante el embarazo te prepares para el posparto.

  1. Rodéate de una red de apoyo.

“Una red de apoyo puede ser la familia pero a veces no lo es y es muy importante que si no está la familia cerca, o no hay familia, tengas de todas formas una red de apoyo, una red de apoyo lo es todo en el posparto”.

Para la especialista, el posparto no debe vivirse sola o en pareja, “somos capaces de hacerlo solas, eso y más, y como pareja también… Es tan significativo, tan profundo, tan transformador y tan complejo que deberíamos de hacerlo en familia”. De este modo, Karen invita a que las personas cercanas estén detrás y a un lado de la nueva mamá.

¿Cómo ser parte de esa red de apoyo?

Sí, es importante estar ahí para ella, pero la pregunta del millón es ¿cómo?.

La doula en posparto Karen Levy (https://www.instagram.com/karen.levy.galvez/), nos explica lo que un familiar puede hacer para ser parte de la red de apoyo para una mamá.

-¡No la juzgues!

Esto es algo sumamente importante, estar para ella es generar confianza y mantener un vínculo en el que ella se sienta cómoda, los juicios rompen la confianza y desvían la honestidad de la relación.

-Escúchala

Si la mamá tiene mucho qué decir, entonces, su red de apoyo tiene mucho que escuchar.

“Tenemos mucho qué sentir, tenemos muchos cambios que están sosteniendo nuestras vidas… Nos estamos convirtiendo en mamás de un día para otro y eso es profundísimo”. 

-Ayúdala

Pregúntale, ¿qué necesitas?

En ocasiones una mamá sabe que necesita ayuda pero no la pide por temor a ser juzgada o por sentirse insuficiente. La red de apoyo debe estar ahí para lo que ella necesite.

“Con estas tres es más que suficiente para empezar… Si tenemos esos 3 ingredientes la mamá se va a sentir libre, se va a sentir segura y va a poder adaptarse mucho mejor a los cambios que está viviendo”.

En este sentido, un posparto amable puede ir muy bien de la mano con el acompañamiento de una doula que también estará presente para la mujer, no sólo para la mamá. Te recomendamos leer nuestro artículo: ¿Cómo mejorar la relación con tu cuerpo en el posparto?

Contar con el acompañamiento de una doula posparto puede llenar de paz, armonía mental y emocional además de salud física a la mamá. Mientras mejor se sienta la mamá, el bebé estará más cómodo y todo en casa estarán más relajados y dispuestos a cumplir con las responsabilidades pues sin duda, el posparto representa un escenario complicado.

  1. Comunícate.

“Comunica cómo te sientes, es súper importante”, Karen le pide a todas las mamis que tengan disposición para hablar de su sentir, es el comienzo para ahuyentar la culpa que se puede llegar a tener por las expectativas o por enfrentarse a algo inesperado. “Sentimos que hay algo mal con nosotras, sentimos que si nos quejamos somos malas mamás o nos van a juzgar porque de todas formas nos juzgan… La sociedad está acostumbrada a juzgar y a juzgar a una mamá, pues más”.

Así que, relájate contigo y con tu entorno, sé abierta y comparte tu sentir sin miedo, puede parecer complicado, pero de lo contrario las voces de afuera callarán a tu voz interior y eso podría lastimarte.

“Estas voces de afuera apagan nuestra propia voz de mamá, entonces no escucho esta voz que sabe, no escucho esta verdad que es la que necesito escuchar, no escucho este instinto”, agregó, “calla el ruido de afuera y escucha este”, dijo Karen señalando a su corazón.

En lo que digas de cómo te sientes podrás encontrar respuestas, confía en ti, “una vez que escuchamos nuestra propia voz podemos saber perfectamente qué necesitamos hacer y dejar de hacer con nosotras y con nuestros hijos”, explicó la doula posparto. “En la medida en la que yo comunico cómo estoy, qué necesito, los demás, mi red de apoyo me puede dar lo que necesito”, esta idea es importante porque es necesario normalizar no estar feliz todo el tiempo en el posparto.

“Es importante poder decir sí puedo llorar, sí me puedo quejar, sí puedo y debo pedir un tiempo fuera para mí porque esto me sobrepasa”.

“¡Se vale quejarnos! Se vale llorar y decir, estor triste, estoy agotada, estoy rebasada”.

  1. Participa en un círculo de mujeres en posparto.

“Que tengan un círculo de mujeres afines a su condición”, para que puedan compartir y recibir aprendizaje de un modo más realista de mujer a mujer que está pasando por algo similar. Esto es importante, ya que en el posparto puede haber momentos difíciles, que pongan a prueba el carácter, la paciencia y el equilibrio de la familia…

Si bien, lo que leerás a continuación es una realidad para muchas mujeres, no tiene por qué sufrirse.

Nosotros queremos hablarte de lo que pocas veces se dice acerca del posparto, para que siendo consciente de lo que vives o vivirás, sepas que hay alternativas que te ayudarán y cobijarán durante este proceso. 

¡No estás sola!

En el posparto o puerperio la mamá está recuperándose de su parto, aprendiendo a ser mamá, cuidando y conociendo a su bebé, atendiendo, según sea el caso, el resto de actividades en casa o en el trabajo y lidiando con lo que esté en su realidad.

Es una escenario complicado, lleno de cambios, aprendizaje y hormonas, si bien, cada mamá puede vivirlo diferente, es un hecho que a todas les representa un proceso de reconocimiento personal y trabajo.

Le preguntamos a Karen acerca de los escenarios más comunes a los que una mamá se enfrenta durante el posparto y su respuesta es una invitación a seguir sensibilizándonos y empatizando con las mujeres que acaban de parir.

“Esto no es lo que esperaba”

“El primer escenario, es el más común que afronta una mamá en el posparto es ‘esto no es lo que esperaba’”, dijo Karen en un modo muy sincero, “y tiene que ver con, entonces, ¿qué esperabas?, ¿desde dónde construimos qué esperar de nuestro posparto”.

En este sentido, es importante desde ahorita hacer una reflexión, qué es lo que nos han dicho acerca de la maternidad en todos sus contextos y qué es lo que realmente va con nosotros en este momento.

Para Karen es fundamental analizar qué es lo que nos han dicho las mujeres de nuestro entorno, además de lo que nos cuenta la televisión, películas, revistas y redes sociales pues en muchas ocasiones es desde esa “perfección” que se genera un concepto romántico de la maternidad

“Vamos construyendo una expectativa de cuando me vuelva mamá”, el generar esta expectativa nos puede jugar en contra pues vivir la maternidad en cualquiera de sus etapas, en este caso, en el posparto, suele ser muy diferente.

“En algunos muy afortunados casos la construimos (la expectativa) con lo que vemos, si tenemos una mamá en posparto muy cercana… Entonces, podemos ver un poquito más de la realidad del posparto, pero generalmente no es así”, enfatizó Karen Levy.

La doula posparto explicó que el estilo de vida de antes, permitía a las mujeres convivir con más mujeres durante sus pospartos por estar en tribus, pero ahora, en una ciudad es más complicado.

Se puede contar con el apoyo de la mamá o la suegra, una hermana o algunas amigas, pero en la mayoría de los casos, no hay un grupo de mujeres que apoye a la mamá.

Entonces, la expectativa que se genera para el momento de recibir al bebé en los brazos viene desde lo romántico, no lo real.

De este modo, al llegar a casa con el bebé en brazos y quedarse sola en casa, sin enfermeras, sin ayuda y convalecientes, puede ser más que abrumador, “esto está o súper doloroso o súper difícil”, dijo la experta para ejemplificar un pensamiento real de una mamá”.

 “Llega el posparto y no es lo que esperábamos, nos duele aquí, nos duele acá”, el cuerpo se dedicó por 9 meses a procurar vida, es normal que quede resentido.

“El parto probablemente fue difícil y, de pronto, nos encontramos con una recuperación física que no esperábamos tener, porque nadie te habla de la recuperación física, nadie habla de cómo queda una vulva o una vagina después de parir a un bebé”, añadió Levy.

También recalcó la importancia de normalizar y no romantizar el posparto, “nadie habla del dolor profundo que puede llegar a provocar una cesárea”, ejemplificó.

Lactancia, un reto que involucra a más de 2

Por otro lado, hay un segundo escenario que se impone después del parto, se trata de la lactancia.

“Resulta que si no nos enseñan a amamantar, si no vemos a otras mujeres amamantar, si no tenemos una asesoría en la lactancia, a veces, puede llegar a ser difícil, no estoy diciendo que en todos los casos”, explicó la doula quien reconoció que también hay casos exitosos de lactancia.

La lactancia es un reto que involucra a más de dos, por un lado, el bebé que debe dejar fluir su instinto para succionar y tener un buen agarre, por otro lado, la mamá debe cuidar su postura y ayudar en el agarre, pero en esa misma dimensión puede haber un papá levantándose a las 3 de la mañana a encender la luz y a acomodar las almohadas de la mamá que se dispone a lactar.

Aunque la lactancia es una interacción mamá e hijo, hay mucho de por medio y es una realidad que el acoplamiento no siempre es fácil y rápido.

“La diferencia de expectativas con la realidad, creo que es el primer encontronazo en el posparto”, agregó.

Las hormonas juegan en contra 

 No sólo es un proceso de recuperación física, también “hay un ajuste muy importante en el posparto, hormonalmente hablando, que nos tiene en un llanto fisiológico las primeras semanas”.

Karen explicó que puede pasar que una mamá que llora suele ser catalogada con depresión por parte de quienes la rodean, “eso genera muchísima presión para una madre en posparto”.

Cuando simplemente es un llanto natural, “hay un periodo en el que es normal llorar y se llama Baby Blues o tristeza posparto”, mencionó la experta.

Karen comentó que la tristeza posparto es normal y se da durante las primeras semanas, “es normal llorar por todo y sentirse triste, tu vida cambió por completo de un día para otro”.

Sin embargo, ante la falta de conocimiento de todo lo que implica el posparto, suelen confundir el Baby Blues con depresión posparto (Linkear nota 8 mes 3).

Para entender más acerca de Baby Blues, Karen lo explicó de esta manera, “el embarazo nos da la oportunidad de vivirlo durante 40 semanas, de vivir esa transformación y esa adaptación… Pero del parto al posparto, son horas”.

¡Ah sí! También hay un bebé

Lo que nos cuenta Karen acerca de lo que atraviesa una mamá en el posparto, ya es de considerarse, pero no podemos olvidar que, en todo este contexto, “tenemos una personita, chiquitita, recién nacida que nos demanda 24/7 y que tenemos que mantener viva”.

Viene un caos para el que no estábamos listas

 Con una mujer recuperándose del parto y un nuevo integrante de la familia que requiere atención todo el tiempo, la mamá se enfrenta a su nueva vida que comienza con, “la privación de sueño, viene dejar de comer a nuestras horas, viene me recupero pero al mismo tiempo atiendo sin parar a un bebé”.  

Para la especialista, Karen Levy Gálvez y para nosotros, es importante que sepas que se puede tener un posparto amable, transitable, lleno de amor y aceptación.

Por eso queremos, con ayuda de nuestra experta, darte herramientas para que vivas tu posparto desde el amor propio y el amor por tu bebé.

¡Todo se vale sentir! 

“Todo se vale sentir, nada de lo que puedas sentir te hace culpable de nada”, compartió Karen para mandar un mensaje a todas las mamás en posparto.

“Bajar la culpa, por llorar, por sentir, por desesperarse, por perder la paciencia, por mirarnos al espejo y no reconocernos, por decir ‘ten, carga a mi bebé, no puedo más’”, que no haya culpa en sentir todo eso en algún momento, unas más que otras”. Con este comentario tan empático de una doula posparto, entendemos que su acompañamiento es un pilar enriquecedor para todas las mamás

“Ante una transformación tan profunda, son bienvenidas todas las emociones”.

¿Dónde encuentro a una doula posparto?

 “En México no hay muchas”, mencionó Karen, “hay muchas doulas de parto, muchas doulas de embarazo pero hay pocas doulas posparto”. 

Sin embargo, nos cuenta Karen, que hay instituciones como CAPPA Latinoamérica (https://cappalatinoamerica.com/) que tiene una lista de doulas posparto.

“Pero la mejor manera de encontrar una doula posparto, desde mi punto de vista, es preguntándole a tu doula de embarazo y parto o preguntándole a tu ginecólogo o ginecóloga”.

Karen también nos explicó que en México, los ginecólogos que no son pro parto humanizado (Linkear nota 2 Mes 5), pudieran no tener referencia para recomendar, “los ginecólogos convencionales no están familiarizados con la existencia de las doulas pero un ‘gine’ proparto, por supuesto que te va dar una lista de doulas”.

¿Sabías que existe la violencia obstétrica? Lee aquí para más información (Linkear nota 4 Mes  6)

¡Pst, pst! Acércate a una doula posparto durante el embarazo

Si en algún punto de tu embarazo tienes dudas acerca de tu médico o quiere ir en contra de la manera en la que tú deseas vivir tu parto, cambia de profesional. Antes que cualquier otra cosa está tu seguridad, confianza y plenitud en una etapa que debe ser vivida y recordada con amor y tranquilidad, “se trata de tu parto, es tu bebé, es tu cuerpo”. 

“Las doulas de embarazo, parto y posparto, acompañamos, no decimos, esto no lo acompaño y esto sí lo acompaño… Nosotras acompañamos todo”, dijo Karen con respecto a el acercamiento tan cálido que una doula puede ofrecer.  De este modo, la especialista nos explicó que una de las partes más importantes de su acompañamiento es el respeto a las decisiones que tome cada mamá con respecto a cómo quiere vivir su maternidad.

Esto es fundamental para darle a cada mujer un trato especializado según sus necesidades, equipo médico y situación personal. Ellas se adapta a lo que la mami y su bebé, requieran. Incluso, si una mamá no quiere amamantar y desea dar leche de fórmula a su bebé, la doula no juzgará a la mamá, al contrario, la acompañará y respetará su decisión para que viva su maternidad según su deseo de la mejor manera posible.

“Nosotros brindamos la información para que tomen las mejores decisiones, pero las decisiones que tomen, se respetan”.

 A pesar de que en este texto encontramos muy relevante el acompañamiento de una doula, no todas las personas conocen su trabajo, “a pesar de que somos muchas las doulas de embarazo, parto y pocas de posparto, no es tan común como debería de ser esta figura de acompañamiento tan importante y tan significativa para una mamá y una familia pero algún día lo seremos”, finalizó Karen Levy. 

La llegada del bebé generó cambios en muchos aspectos, desde el cuerpo de la madre hasta la dinámica familiar, no es para menos que cueste adaptarse pero, ¡buenas noticias! Es una etapa que tiene un principio y un final, pasará.