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Updated on Agosto 22, 2024
Created on Abril 26, 2023
¿Has escuchado acerca de la hora dorada en el nacimiento del bebé? También se le conoce como hora de oro u hora sagrada y es un momento especial tanto para la mamá como para el bebé. De hecho, hay estudios que desde la neonatología hablan de los beneficios de la hora dorada para la salud del bebé y para fortalecer la conexión entre el recién nacido y la mamá.
La hora dorada, hora de oro u hora sagrada, son los primeros 60 minutos que transcurren después del parto, incluso, puede ser un poco más de tiempo, mientras más mejor. Si bien, en algunos hospitales están los protocolos para que durante este tiempo el recién nacido y la mamá puedan estar juntos, no siempre es algo que pueda llevarse a cabo. Esta hora dorada se refiere al tiempo de calidad que los recién nacidos sin complicaciones, pueden pasar con su madre después del parto de forma ininterrumpida.
Durante esta primera hora de vida fuera del vientre, los bebés comienzan a conectar con su madre, el contacto piel a piel con ella es importantísimo para la lactancia y otras funciones de su cuerpo. De preferencia debe ocurrir fuera de la sala de parto para que puedan disfrutar de un entorno tranquilo y relajante. Además, la mamá debe estar con el pecho descubierto, sin tirantes o mangas, su torso debe estar plenamente dispuesto a recibir a su recién nacido. De esta forma, no sólo se puede emplear el contacto piel a piel que estimula y beneficia la lactancia, la salud del bebé también se ve favorecida.
Las ventajas de la hora dorada son físicas y emocionales.
En las recomendaciones (https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/272435/WHO-RHR-18.12-spa.pdf) de la Organización Mundial de la Salud para los cuidados durante el parto para una experiencia de parto positiva, la OMS dice:
“Se debe mantener a los recién nacidos sin complicaciones en contacto piel con piel (CPP) con sus madres durante la primera hora después del nacimiento para prevenir la hipotermia y promover la lactancia”.
Un estudio (https://www.nature.com/articles/s41372-019-0545-0) publicado en la revista Nature, profundizó más al respecto y concluyó que tener un protocolo adecuado para la hora dorada, ayuda a reducir la hipotermia y la hipoglucemia en bebés extremadamente prematuros.
Es decir, sus niveles de glucosa en sangre y su temperatura serás más saludables.
Según un artículo (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4235060/#jpe.1058-1243.23.4.211.bib013) publicado en el National Center for Biotechnology Information, en la primera hora después del nacimiento, la mamá tiene un alto grado de oxitocina, que es llamada la hormona del amor. Esta oxitocina llega al bebé hasta por medio de la placenta, además, la hormona también aumenta gracias al contacto piel a piel, lo que genera una conexión entre la mamá y el recién nacido.
Incluso, otros estudios señalan que las mujeres que no vivieron la hora dorada pueden llegan a tener un manejo más brusco de su bebé durante la alimentación o el cambio de ropa. También sugieren que desarrollan un vínculo afectivo menos intenso y tienen una respuesta menor a las señales del bebé a los 4 días de postparto.
Debido al punto anterior, el momento que comparten entre mamá y bebé, la hora dorada logra reducir los niveles de estrés para ambos. Además, ayuda al recién nacido en la transición a la vida posnatal, ya que al poder disfrutar de la hora dorada junto a su madre, llora menos, por lo que puede estar más tranquilo los primeros minutos de su nueva vida.
Es durante este primero contacto entre mamá y bebé que comienza la lactancia. Es en este piel con piel que el instinto del bebé comienza a despertar, haciendo que su boquita busque el pezón de su mamá. Estando entre sus brazos y con el calor corporal, el bebé estará relajado y comenzará a buscar su fuente de alimento.
La OMS recomienda que la mamá tenga la oportunidad de tener a su bebé piel con piel para que comienza la lactancia de forma exitosa. Si quieres saber más acerca de la lactancia y el contacto piel a piel, da click aquí.
Para lograr que la hora dorada se cumpla en todo su esplendor y traiga estos beneficios para la mamá y el bebé, se deben retrasar los procedimientos convencionales del bebé, es decir, pesar y medir al recién nacido, bañarlo, inyectarle vitamina k o tomar una muestra de sangre, incluso la profilaxis ocular, que consiste en limpiar los ojos del bebé para evitar conjuntivitis neonatal, deben esperar. Si el bebé está sano y no hay una urgencia que ponga en peligro su vida, el equipo médico debe respetar el momento y dejar a la mamá y a su bebé juntos, lo más tranquilos posible.
Para que esto suceda, los padres deben preguntar cómo y cuáles son los protocolos de parto y postparto que sigue el hospital en donde serán atendidos. También pueden comunicarle a su médico, su intención de disfrutar de la hora de oro para que, a medida de que la salud de la mamá y del bebé lo permita, se pueda llevar a cabo.
La hora dorada es el inicio de una nueva etapa familiar que debería ser más procurada por los protocolos médicos, para lograr que el comienzo de la vida del bebé esté rodeada de armonía y el cariño de su madre.
